‘Mistaken for strangers’ disponía de todos los ingredientes necesarios para convertirse en el documental definitivo sobre The National: acceso directo a los miembros del grupo en cualquier momento y lugar durante toda una gira, una banda en el mejor momento de su carrera y la buena predisposición de todo el séquito, teniendo en cuenta que el director es Tom Berninger, hermano del líder de The National. Y sin embargo, ‘Mistaken for strangers’ es probablemente el documental de la historia del rock más alejado de lo que uno espera encontrar en este tipo de formato. No es un documental al uso, ni pretende serlo. Tontea con el mockumentary, pero desde la distancia. Ante la falta de etiquetas, y aunque parezca atrevido, lo más razonable es acordar que ‘Mistaken for strangers’ es un género en sí mismo.
Tom Berninger es un simpático fracasado al que su hermano Matt le dio la oportunidad de su vida. Fue el roadie de la gira y, hasta que lo echaron (más que merecidamente) por su incompetencia, su cámara siempre estuvo encendida. Pese a que disponía de material como para montar un documental estándar, Berninger tomó la decisión (el momento está recogido en el documento) de hacer algo tan inusitado como egocéntrico. En ese momento, ‘Mistaken for strangers’ dejó de ser un documental sobre The National para pasar a ser un documental sobre el propio Tom Berninger y sus miserias. Con un montaje tan caótico como su creador, el documento es una especie de puzzle al que le faltan algunas piezas y precisamente ahí radica su encanto.
Y así, entre peleas que nos hacen pensar en cómo cambian o no las personas cuando consiguen el éxito o la difícil relación entre hermanos demasiado distanciados por la edad, llegamos a la deliciosa escena final, en la que Berninger se destapa como lo que es: una persona con muchos miedos y acomplejada por la enorme figura de su hermano, y que sin embargo siempre estará ahí para lo que necesite (en este caso, y la metáfora es clarísima, aguantarle el cable del micrófono mientras Matt crece y crece como la estrella de la función). Y es que si ‘Mistaken for strangers’ acaba siendo toda una experiencia es porque nos hace reflexionar sobre lo terriblemente especiales que son las relaciones fraternales. No está nada mal, teniendo en cuenta que cuando empezó aquello apestaba a ser un documental de usar y tirar.