Miquel y Carlos tienen varias cosas en común: ambos nacieron en 1981, son del mismo barrio de Gandia (Valencia) y sus dos grandes pasiones son el fútbol y el rock and roll. Otro aspecto que comparten es una visión negativa del balompié de nuestros días, en el que el marketing y el mercantilismo tienen tanta importancia (o más) que si el balón entra o no en la portería. Es por ello que son los responsables desde hace más de dos años de ‘Odio el fútbol moderno’ (tanto la página de Facebook, que cuenta con más de 60.000 seguidores, como el blog), donde dan rienda suelta a su antipatía por la deriva que ha cogido el fútbol actual, y recuerdan con alegría aquellos tiempos cada vez más lejanos de futbolistas sin depilarse y de entrenadores en chándal, con la esperanza de que aquel deporte de valores y sentimientos pueda regresar algún día.
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-¿Cuál es vuestro primer recuerdo futbolístico? Imagino que no será un peinado de Pogba…
Miquel: Ni mucho menos. Yo de pequeño ya estaba en un vestuario, pero recuerdo un Bulgaria-España sub-21 jugado en mi pueblo. Sé que fui al campo, posiblemente la primera vez, guardé años la banderita de España… Luego no sé qué hice con ella.
Carlos: Yo recuerdo que de muy pequeño era del Real Madrid. En realidad, no sé por qué, me encantaba Santillana (tenía una pequeña equipación merengue con el nueve). Esto a mi padre (natural de Enguídanos, Cuenca) le encantaba pero mi abuelo materno (del barrio de Torrefiel en Valencia) no lo podía soportar. Por eso mi abuelo me llevó a Mestalla creo que en el año 87 u 88, no lo recuerdo, y vimos un Valencia-Málaga y ya no hace falta decir nada más.
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-¿Y algún equipo fetiche de vuestros años mozos?
Carlos: Como ya he dicho, pese a las numerosas desilusiones y a la situación actual, mi equipo es el Valencia. Otro equipo que me gustaba era la Fiorentina, su camiseta era bellísima, y cuando se juntaron Batistuta y Rui Costa aquello fue maravilloso.
Miquel: Yo nací en una familia colchonera, y aunque con el tiempo me fue tirando más el azulgrana, mi equipo es el de la segunda casa donde me crié, el CF Gandia, hoy moribundo.
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-¿Cómo nace el proyecto ‘Odio el fútbol moderno’? ¿Qué es lo que pretendíais?
Miquel: Nace de la casualidad y un poco con la “guasa”, teníamos algo que decir, pero no sabíamos ni cómo decirlo ni dónde decirlo. No sabíamos por qué, el fútbol ya no nos gustaba tanto como antes.
Carlos: Yo empecé a ver el España-Italia de marzo de 2014 y vi que España, en casa, vestía de negro. Me dio mucha rabia: primero porque el partido era en el Calderón y segundo porque el equipaje era terrible y nada tenía que ver con la historia de la selección. Creé la página con el móvil, añadí a mis amigos, entre ellos Miquel, lo nombré coadministrador y ahí empezamos.
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-El crecimiento de la página ha sido brutal, tenéis casi 60.000 seguidores y no paráis de sumar nuevos adeptos. ¿Cómo os explicáis este éxito?
Miquel: Constancia. Desde hace algún tiempo no ha habido un día en el que no hayamos publicado algo. Al principio no teníamos ni un solo “me gusta”. Esto nos costó unos meses. Nunca hemos aceptado la opción de Facebook de pagar para promocionar nuestras publicaciones, así que ha sido difícil.
Carlos: Todo cambió en mayo o junio del año pasado con una publicación que hizo Miquel de una foto de Bebeto y Mauro Silva en la playa. Aquella publicación corrió como un reguero de pólvora y empezó a subir nuestro público como la espuma. Hemos crecido 55.000 personas en el último año.
La mítica imagen de Bebeto y Mauro Silva, en la playa, con la camiseta del Dépor
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-¿Cómo es el prototipo de seguidor de ‘Odio el fútbol moderno’? ¿Existe este prototipo? Lo digo porque veo a gente de todas las edades y no sólo personas mayores…
Miquel: Según nuestros datos estadísticos es un hombre de nacionalidad española de 30 a 40 años. Muchos jóvenes no entienden de qué nos quejamos porque no vivieron el fútbol de antaño (aun así tenemos seguidores jóvenes), y los mayores no suelen utilizar tanto las redes sociales (aunque tenemos muchos también) .
Carlos: Nos gustaría que hubiera más gente de otras nacionalidades. Empezamos a tener mexicanos, chilenos, argentinos, uruguayos e italianos… Y, por supuesto, más chicas, que según nuestras estadísticas son el 4% de nuestro público. Son pocas pero buenas.
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-De vuestros posts se desprende que os lo tomáis muy en serio. Estáis atentos a efemérides, buscáis jugadores que tengan relación con dos equipos cuando estos se enfrentan… la sensación es que existe un trabajo de documentación serio y no tiráis sólo de memoria.
Miquel: (Risas) La mayoría de las veces tiramos de memoria, leíamos mucho material: guías, Onces, France Football, Dinámico, Don Balón… Créeme. Pero hoy en día es más fácil buscar efemérides en la red. Estudiamos durante muchos años mucho fútbol sin saberlo y el resultado es este.
Carlos: Ese momento en el que te das cuenta de que recuerdas un montón de futbolistas, partidos y demás pero no recuerdas lo que cenaste ayer.
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-Explicadnos cómo funcionáis. Miquel, tú te ganas de la vida en el sector de la hostelería y tú Carlos dando clases de castellano en una universidad eslovaca. Administrar esta página es un hobby pero dedicáis varias horas al día. No debe ser fácil.
Carlos: Pues dedicamos muchísimo tiempo, la verdad. Te puedes pasar horas y horas buscando la foto idónea para lo que quieres decir. No quieres ser repetitivo. Quieres ser original y, además, tenemos otras cosas en la cabeza: trabajo, estudios, familia, amigos, etc.
Miquel: Mientras llevo la bandeja voy pensando los posts, llego a casa y los programo para el día siguiente. Nuestras parejas odian el fútbol moderno, pero también que odiemos el fútbol moderno (risas).
Carlos posando orgulloso con la camiseta del Valencia
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-Hechas las presentaciones, que la pelota empiece a rodar. ¿Cuándo empezó a joderse todo? ¿Ginola? ¿Beckham? ¿Los galácticos?
Miquel: Pensamos que es una serie de acontecimientos que se producen durante los años noventa: las Sociedades Anónimas Deportivas (S.A.D.), los contratos televisivos, la ley Bosman… Todo esto ayudó a la especulación en el fútbol. Por ejemplo, el Barcelona durante los ochenta jugó sin publicidad y la marca que lo vestía era Meyba (una empresa catalana). Algo impensable hoy en día con Nike y Qatar Airways.
Carlos: Todos estos acontecimientos han hecho que el socio de toda la vida, el aficionado, pase de ser eso, un aficionado, a un mero cliente que consume una marca. Se va borrando el sentimiento para dejar paso al mercantilismo.
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-¿Qué figuras futbolísticas creéis que representan mejor la esencia de ‘Odio el fútbol moderno’? A mí se me ocurre una por encima de todas: Luis Aragonés.
Carlos: Tenemos muchos. Todavía hoy. Sin duda alguna Aragonés vivía el fútbol como pocos. Pero también otros. Todos esos currantes como Salillas, Abadía o Pedro José.
Miquel: Muchísimos. Quizá también Sócrates por sus ideales, representa muy bien el fútbol que nosotros quisiéramos. Y gente como el utillero del Valencia: Bernardo España “Españeta”. Toda una vida dedicada al Valencia CF.
Miquel, con un balón antiguo y la camiseta del Levante
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-A veces cuando os leo me da la sensación de que no sólo odiáis el fútbol moderno, sino también el tipo de sociedad que hemos creado. El fútbol moderno se basa en un capitalismo extremo, en la banalización de lo que pasa dentro y fuera del campo, en la pérdida de valores… ¿No es un reflejo del mundo occidental de hoy en día?
Miquel: Claramente el fútbol es un espejo de la sociedad. Lo vimos también en la última Eurocopa con los hooligans. Los discursos actuales de racismo y de división se ven reflejados en parte en los aficionados.
Carlos: Vivimos en un mundo totalmente prostituido. Todo se compra. Todo tiene un precio y el fútbol también.
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-¿Qué papel juegan los medios de comunicación deportivos en la concepción actual del fútbol? La prensa deportiva nunca ha sido brillante en España, pero la actual produce vergüenza ajena…
Miquel: No es prensa deportiva. No hacen resúmenes de los partidos. No ves los goles. Son sensacionalistas, se hacen amigos de los futbolistas y funciona como altavoz de los poderosos.
Carlos: Se trata de una prensa amarillista que busca la polémica. Para ellos sólo existen el Madrid y el Barcelona, Cristiano y Messi. Dan mucha vergüenza, sí, para ellos es más importante el descapotable de Cristiano y el pelo de Messi que el fútbol del resto de equipos de primera, segunda, internacional o femenino. Menos mal que existe internet y te puedes informar de otra manera: Los otros 18, Wanderers, Kaiser Magazine o Panenka, por ejemplo.
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-“Denunciamos el fútbol negocio”, decís en vuestro blog. El abogado del diablo os dirá que el fútbol siempre ha sido un negocio…
Carlos: Sí y no. El fútbol es cada vez más elitista. Es caro. Las entradas. Las camisetas. No dan casi nada en abierto. Mueve mucho más dinero que antes y cada vez es más negocio y menos deporte.
Miquel: En los últimos años, el fútbol es más show que deporte. Nosotros veíamos el fútbol como un deporte y una cultura. El fútbol de hoy es especulación, fondos de inversión (que blanquean dinero que a saber de dónde viene), es mafia, explotación y corrupción… ¿Cuántos muertos lleva el mundial de Qatar? Y nadie dice nada.
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-También reconocéis que le dais al fútbol “un toque nostálgico”. En este punto, me gustaría haceros una apreciación. Me da la sensación de que a veces os pasáis de nostálgicos, mitificando el fútbol ‘antiguo’ como si absolutamente todo lo pasado hubiese sido maravilloso…
Miquel: El fútbol y la sociedad de antes también tenían numerosas carencias que el fútbol moderno y la sociedad actual no han sabido solucionar. Más bien las han potenciado. El fútbol de antaño era mucho más natural, más libre. Sabemos que la coyuntura social y política era difícil. Pero, ¿y ahora? Hemos crecido con valores. Nosotros utilizamos el fútbol moderno para denunciar la sociedad, y la nostalgia para denunciar al fútbol moderno.
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-¿Creéis precisamente que la nostalgia es una de las claves del éxito de vuestra web? Otros proyectos basados en ella, se me ocurre por ejemplo ‘Yo fui a EGB’, también han funcionado de maravilla…
Carlos: Sin duda la nostalgia es nuestra mejor herramienta para denunciar. Triunfa lo “retro”, lo de antaño, porque había esencia. Hoy todo está globalizado, es artificial. El fútbol está vacío y por eso es aburrido.
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-En algunos de vuestros posts también se desprende que el odio al fútbol moderno también es una añoranza de cuando erais niños y jugabais al fútbol en la calle o en el colegio (algo que, por cierto, cada vez se ve menos en las ciudades). ¿Existe algo de melancolía también?
Miquel: Seguro que muchos seguidores todavía recuerdan algún golazo en el patio del colegio. La infancia de un futbolero está plagada de buenos recuerdos que perduran. Nosotros somos lacónicos en esto. En mi barrio todavía hay niños que juegan al fútbol en la plaza. Con educación no hace falta prohibir nada.
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-¿Cómo creéis que será el fútbol en 15 o 20 años? ¿Puede ser que algún día explote la burbuja y volvamos a los tiempos de antaño o eso es algo imposible?
Carlos: Nosotros somos positivos respecto al futuro. Si la página tiene tantos seguidores es porque a mucha gente no le gusta el modelo actual. Y el fútbol será lo que la gente quiera que sea. Ahora están creciendo los Clubes de Accionariado Popular: El FC United of Manchester es el más importante a nivel internacional, en España tenemos el Ciudad de Murcia, el Ceares o el Unionistas de Salamanca. También se han creado otros más recientes como el Aspense o el Orihuela. Otro fútbol es posible.
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-Me gusta mucho de vuestra web que además de los equipos de accionariado popular también reivindicáis el fútbol regional. ¿Son ellos el último bastión ante la tiranía del fútbol moderno?
Carlos: Ojalá tuviéramos los mecanismos para poder cubrir mejor el fútbol regional, popular o femenino. Los medios los marginan. No venden. No sabemos si es el último bastión pero sí que es cierto que hacen el fútbol mucho más democrático y sostenible. Su éxito es el de todos los futboleros auténticos. Otro fútbol es posible.
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-Una de las cosas que más odio del balompié de nuestros tiempos es que haya ligas históricamente potentísimas como la italiana o la argentina que ahora den pena. Y mientras tanto en China o Arabia Saudí haciendo fichajes millonarios.
Miquel: Claro. El fútbol moderno ya está utilizando todos los mecanismos para crear negocio en países adinerados o muy grandes como China. Los estadios no se llenan todavía porque no hay tradición futbolera pero los gobiernos locales y la FIFA trabajan para abrir mercado allí y expandir el negocio. Es imperialismo futbolístico.
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-Una idea divertida que se me acaba de ocurrir. Si de aquí a 30 años aún tenéis esta página, haréis posts recordando lo bonito que era el fútbol cuando jugaban Cristiano Ronaldo, Messi o Neymar… Sería paradójico, ¿verdad?
Miquel: No. La página no es sólo fútbol retro. Intentamos no publicar nada del nuevo milenio y así seguiremos. Y tenemos la esperanza de que la burbuja futbolística explote y que el fútbol de aquí a 30 años sea mucho mejor y nuestra página no sea necesaria. Porque hoy sí es necesaria.
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-Y ya que nos ponemos con la ciencia-ficción. ¿Cuál es el futuro de ‘Odio el fútbol moderno’? ¿Os veis en ello durante mucho tiempo? ¿Puede dar el salto a otros formatos como el libro?
Carlos: Nos gusta lo que hacemos y, aunque dedicamos mucho tiempo a cambio de nada, seguimos muy ilusionados. Nos llegan mensajes impresionantes que nos motivan mucho. En lo del libro, estamos en ello, y también tenemos en mente hacer un festival el año que viene con birras, pachangas, charlas, futbolines y conciertos.
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-Acabamos, pero antes, un pequeño test. Decidme vuestros tres jugadores favoritos del fútbol antiguo (y por qué lo son).
Miquel: Sócrates por sus ideales, Di Stéfano por su aporte y por su educación, y Le Tissier por su fidelidad y por su amor a unos colores y no al color del dinero.
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-Y ahora, tres jugadores actuales que pese a formar parte del fútbol moderno os gusten.
Carlos: Gábor Király por su autenticidad durante la reciente Eurocopa, Andrés Iniesta por su sencillez y saber estar, y Thomas Müller por su trabajo y por su amor al club en el que se formó.
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-Y la pregunta con la que siempre acabamos nuestras entrevistas. Recomendad tres canciones a nuestros lectores (pueden estar relacionadas o no con el fútbol).
Carlos: ‘Iberia sumergida’ de Héroes del Silencio, ‘Estadio Azteca’ de Calamaro y ‘Odio eterno al fútbol moderno’ de la F.R.A.C.
Miquel: ‘Helter Skelter’ de The Beatles, ‘The Passenger’ de Iggy Pop y ‘A la sombra de la sierra’ de nuestros amigos y colegas de jarana, La Raíz.