Enrique se ha roto el peroné. Por lo pronto, le esperan unos meses de reposo. ¿Qué quiere decir esto? Pues que tiene tiempo libre para oficializar su estado de cuarto inercio: ya han visto su artículo. ¿Significa eso que vamos a recomendarles cuatro canciones por semana? Ni mucho menos. Las alas hay que ganárselas, Enrique. (Eso, y que acaba de salir de quirófano y no puede escribir.)

La elección de Raúl

JOAQUÍN SABINA – CUANDO ME HABLAN DEL DESTINO

Un tango de antes de que se inventara el tango. Un tango mucho más argentino que cualquier tango argentino. Compuesto, además, por un jienense más madrileño que cualquier madrileño. Suena portuario, tabernario y lumpen. Hay frases certerísimas, imágenes de perdedor y, en definitiva, altísima literatura de cuando Sabina era Sabina.

Es una historia clásica y muy evidente de fracaso vital, de podrido descenso a los bajos fondos. Me encanta la imagen de libertad y chulería del que se sabe sin nada que perder después de perderlo todo. “Bajo el sol que me apuñala vivo sin patria ni dueño, como el aire lo regalan y el alma nunca la empeño, con las sobras de mis sueños me sobra para comer”.

El relato mil veces contado de disfrutar un día del oro pero despertarse a la mañana siguiente en el fango, besando la lona. Con la envoltura del bandoneón, la guitarra, las palabras en italiano de Sabina y los sonidos de gaviotas, el tono es melodramático y cinematográfico. Me la sé enterita y mira que hay versos. Si me veis y gritáis tres veces Sabina, os la canto.

La elección de Withor

EL COLUMPIO ASESINO – MOSCAS

Moscas o la metáfora hecha canción. Las pateras en la playa y los negros pudriéndose en ella. Y allí, como no, las moscas. Parece la notícia del día, pero no lo es: es más importante el último anuncio de calzoncillos protagonizado por Cristiano Ronaldo (‘fútbol putas y gigolós’).

Denigrante, ¿verdad? Vayamos a la guerra y busquemos a los culpables. ¿Es esto culpa de los medios de comunicación? ¿Del Gobierno? ¿De las empresas? O quizás…¿la culpa es nuestra, de todos nosotros?… De hecho, ¿tan importante es? ¿Tan cruciales en nuestra vida son las putas moscas? ¿Realmente nos importa?

El Columpio Asesino pega una buena patada en los cojones a la hipocresía y al pensamiento postmoderno con esta canción (‘Mírate en el espejo, y deja ya de cacarear’). Ya lo dijo su cantante en una entrevista: ‘Yo prefiero decir que no hago nada por cambiar el mundo aunque sea una mierda.  Al menos soy sincero y no me quito la culpa de encima criticando a Bush’. Sinceridad que puede ser criticada pero que a mi me hace admirarle aún más. Que sigan viniendo las moscas. Yo seré feliz, mientras pueda. Y más con canciones como estas. Además hoy viene el Papa. ¡Qué bendición!

La elección de V the Wanderer

MATCHBOX TWENTY – UNWELL

Miro los restos de la barbacoa mientras Leedham me acerca otra cerveza. Insiste en enseñarme su colección de fósiles, huesos y otros restos encontrados en la apabullante naturaleza neozelandesa. Luego señala al techo: ha escrito un poema rodeando todo el comedor. Me pregunta «you know what it is about?» y yo respondo «love, mate». Me abraza, «no one ever gets it and you do!»

Leedham me pregunta por mi hogar, mi origen, y me dice que él es un hombre pobre y no puede ir al mundo, así que quiere que el mundo venga a su casa. «This house is so full of energy», me sale, dejándome llevar por el ambiente y la cerveza. No lo dicen, pero son una pareja de hippies supervivientes.

Justine, su mujer, señala la cadena de música, «if you guys wanna play some music…». Petra me enseña el «Exile on Mainstream», ponemos «Unwell». Sentados en el suelo, canturreamos «I’m not crazy, I’m just a little unwell», y Leedham y Justine bailan sonrientes.

Y de repente me viene la respuesta a todas las preguntas, allí, a media luz, entre risas y versos en las paredes. Por esto viajo. Por esto me gusta la música. Por esto merece la pena.