En la era digital, cualquiera puede acceder a la comedia con tan solo unos pocos clics. Pese a todo, nada es equiparable a la magia del directo, y de esto saben mucho Tricicle, que en su último espectáculo, Bits, ofrecen un recital de humor 2.0. y carcajadas analógicas.

Tricicle Bits

Mediante unas cortinillas relacionadas con la red de redes (con narración del gran Juan Carlos Gustems, por cierto), el trío catalán enlaza varios sketches que, en realidad, y como ellos mismos reconocen, poco o nada tienen que ver con internet.

Una carrera entre ancianos, tres señoras en el supermercado, el clásico parroquiano que no se va a la hora del cierre, dos aficionados a la pesca, la fauna de discoteca, incluso un homenaje a Les Luthiers (de cuyo último espectáculo, Lutherapia, hablamos aquí)… Tricicle consigue darle una vuelta de tuerca a cualquier situación y provocar una sonrisa que no abandona al espectador en la hora y media de espectáculo. Bueno, miento: a veces la sonrisa abandona la boca, que se abre para irrumpir en una sonora carcajada.

Carles Sans, Joan Gràcia y Paco Mir tienen un dominio envidiable de los tiempos de la comedia. Manejan perfectamente las pausas, saben cuándo alargar un chiste y, más importante, cuando dejar de alargarlo, y su expresividad gestual es brillante. Exceptuando cuando fui a ver a los grandes maestros Faemino y Cansado, nunca he disfrutado tanto en un teatro.

Tricicle Bits ancianos

Bits es, quizá, el espectáculo en el que más se oye hablar al trío catalán, especialmente en uno de los gags, en el que el diálogo abunda… aunque en un francés más que correcto. Esta metabroma pone de manifiesto que no hace falta que haya diálogos chispeantes para provocar la hilaridad del respetable. Al menos, no si se tiene el talento para el mimo que tienen estos tres veteranos del escenario, de entre los que hay que destacar al grandísimo Paco Mir, un hombre cuya gestualidad recuerda a la de un dibujo animado de Tex Avery.

Dicen los Tricicle que Bits es su último espectáculo con material nuevo, porque no piensan «eternizarse en los escenarios». Aunque no descartan una gira de despedida, lo cierto es que no deberían ustedes esperar más: salgan corriendo a ver Bits, que está en el Teatro Olympia de Valencia hasta el 19 de mayo. Si no son de la tierra de las naranjas y los trajes, estén pendientes de la web oficial y acudan raudos cuando pasen por su ciudad. No se arrepentirán.

Javi Bóinez, Reflexiones de un tipo con boina